Hace apenas 3 semanas que el presidente de EEUU Donald Trump ha regresado al poder en un segundo mandato.
Aunque sus primeras semanas han sido sumamente polémicas, no podemos decir que Trump ha engañado a nadie. Cada una de las decisiones y acciones que ha tomado ya habían sido anunciadas y publicitadas por él mismo desde el mismo momento en que Joe Biden había tomado el poder tras vencerlo en las elecciones de 2021 y a las que el actual presidente no se cansa de señalar como “fraudulentas” sin mostrar prueba alguna de tal fraude.
Algunas cosas llaman la atención, más allá de las políticas claramente segregacionistas del señor Trump, y hablo de la percepción que tienen muchos latinos acerca de este nuevo período presidencial. Y es que esta percepción distorsionada de la realidad, que también alcanza a muchísimos ciudadanos estadounidenses, pareciera responder a un fenómeno psicológico de “auto complacencia”, que se refiere a la capacidad que tiene nuestra psique de acomodar la realidad y los hechos a una interpretación, o justificación, que se amolde a lo que queremos creer.
-Están deportando venezolanos-
JUSTIFICACIÓNES: Está bien, porque son criminales/ Esta bien porque se han aprovechado del sistema/ esta bien porque son malos migrantes/ Esta bien porque son ilegales/etc
Los que justifican, por algún motivo de estudio, se "separan" psicológicamente del grupo de afectados. Establecen un "ellos" y un "Yo". De alguna manera quieren pensar que pertenecen al grupo de “beneficiarios” del poder. Quieren pensar que ellos y Trump, están del mismo lado.
Si bien Latinoamérica (y el resto del mundo) se ve afectada por la economía de EEUU, no es menos cierto que EEUU se beneficia inmensamente de los tratados y comercialización con los demás países. Es de estos otros países que EEUU adquiere sus materias primas, gran parte de su mano de obra, e incluso tecnologías y cerebros.
Para nadie es un secreto que una parte importante de las “grandes mentes” que han hecho vida en EEUU son de hecho, extranjeros. Es un hecho.
Después de la Segunda Guerra Mundial, EEUU otorgó la ciudadanía de contrabando a un importante número de científicos Nazi para desarrollar su propio programa misilístico, obviando los crímenes de guerra que estos habían cometido. Operación “Paper Clip” fue el nombre de la operación, y cualquiera puede corroborar esto con una simple búsqueda de información en internet. Fue gracias a Wernher von Braun, el Nazi responsable del misil balístico V2 de los Nazi que EEUU logró llegar a la luna. Su información (para los escépticos) está incluso en la pagina oficial de la NASA, donde se le nombra como “el científico de misiles mas importante de la historia”.
Pero la hipocresía no para con el tema migratorio, sino con los temas de justicia. Basta con corroborar como los indocumentados (término correcto. No hay nadie ILEGAL en el mundo) aportan más de 100 billones de dólares anuales en impuestos que alimentan los retiros de ciudadanos estadounidenses pero o reciben NINGUN BENEFICIO de este aporte. No reciben ni siquiera el reconocimiento de este aporte. Entonces para el gobierno, los indocumentados son buenos para trabajar por sueldos bajísimos y pagar impuestos, pero son señalados de criminales. Por otra parte, hay poderosos ricos con hasta 34 sentencias de culpabilidad por evasion de impuestos, asalto sexual y fraude que no son amonestados en manera alguna. Elon Musk, nuevo socio del presidente Trump en su nueva administración, es Sudafricano y fue un inmigrante ilegal por un buen tiempo. Esto no ha sido obstáculo en absoluta para que ahora sea el hombre más poderoso del gobierno de Trump.
Vemos a una administración que culpa a sus países vecinos del consumo de fentanilo y otras drogas que matan a ciudadanos estadounidenses, pero no escuchamos NUNCA de un solo operativo policial que haya detenido a alguien DENTRO de los EEUU por distribucion de drogas. No vemos ni una sola campaña anti drogas en EEUU. No existe NI UNA SOLA PERSONA estadounidense señalada por pertenecer a ninguna organización vinculada a las drogas en carteles de "buscados" por la DEA. No sabemos ni de UNA SOLA operación dentro de EEUU de la DEA con la intención de desmantelar un cartel de drogas... la culpa es de México y Canadá.
En lugar de atender intereses como detener la inflación, la nueva administración ha declarado una guerra sin cuartel a los inmigrantes de origen latino. No hemos visto a nadie comentar sobre la preocupación y deportación de criminales de otras partes del mundo. Incluso, se ha llegado a plantear la disposición de aceptar en calidad de “refugiados” a ciudadanos BLANCOS sudafricanos, que según la perspectiva del nuevo gobierno, son una minoría oprimida por el gobierno sudafricano. Los blancos beneficiados por el Apartheid son los "oprimidos" según Trump.
Se han hecho igualmente comentarios desafortunados como “el racismo afecta principalmente a los blancos” haciendo referencia a los ciudadanos estadounidenses, que representan aproximadamente el 60% de la población. Trump ha decidido, sin tener en si mismo potestad alguna para hacerlo, cambiar el nombre al Golfo de México, nombrado así hace más de 400 años. Un acto risible para las instituciones serias a nivel mundial que han obviado tal acto de soberbia e ignorancia.
Trump ha decidido reavivar una campaña de descrédito hacia los latinos, a los que señala, nuevamente, de criminales, traficantes y terroristas. En ese clamor, ha prometido batir cualquier record de deportación, y para hacerlo, incluso ha habilitado la cárcel de Guantánamo en Cuba como destino para esos “criminales”, y mientras habla de “criminales que invaden las fronteras”, al mismo tiempo pretende anexar a Canadá como el estado 51 de la unión, comprar Groenlandia, adueñarse de la Franja de Gaza para hacer un “desarrollo turístico”, desalojar a mas de 2 millones de gazatíes de sus hogares y enviarlos a Jordania y Egipto (sin la aprobación de esos países por cierto!) y cobrarle a Ucrania la ayuda en la guerra haciendo que esta le ceda a EEUU parte de su territorio. Pero hay que hacer un pequeño paréntesis en este punto: Los deportados "criminales" han sido declarados criminales por ser indocumentados, no por ser de hecho, criminales. No nos equivoquemos. La excusa de estar deteniendo criminales afecta a unos 11 millones de latinos en EEUU, y aunque es posible que hayan efectivamente detenido a algunos criminales, estos no representan ni el 1% de los afectados. Bajo la ley estadounidense, vivir en el país sin autorización o estatus legal no es una falta criminal sino civil. Por lo tanto, es falso que las personas indocumentadas tengan de por sí un "récord criminal" como lo asegura el gobierno de Trump. Si esto es lo que dice la ley, cabe preguntarse entonces si las deportaciones masivas son de hecho, legales.
Un ejemplo claro es la detención de miembros del infame Tren de Aragua, banda criminal internacional de origen venezolano. En primer lugar, cabe preguntarse como los atrapan. ¿Han sabido siempre donde están?. ¿Cómo los identifican?. ¿Cómo puede operar una banda de este tipo en un espectro tan grande como asegura el gobierno de Trump sin la ayuda de miembros locales?. ¿Cuantos miembros locales de esta banda, entiéndase estadounidenses, que facilitan sus operaciones han sido detenidos?. ¿Cuántos miembros del Tren de Aragua hay en EEUU y cuantos de los venezolanos afectados por las políticas anti inmigrantes son de hecho miembros de bandas criminales?. ¿Cómo se justifica que supuestas medidas contra una banda criminal con unos cientos de miembros afecte a toda una comunidad de millones?.
Todo esto, entre muchas otras cosas, y solo para empezar, ha sucedido en solo 3 semanas.
En lo doméstico, el gobierno ha desmantelado docenas de programas de ayuda y protección a los ciudadanos que hacen vida en EEUU, como el organismo regulador de bancos, los programas de Igualdad, Diversidad e Inclusion, y cualquier programa de ayuda federal a programas como Medicare (seguro medico accesible), programas de alimentación escolar y cupones de comida para familias necesitadas entre otros cientos de programas. Igualmente se han despedido miles de empleados públicos y se han cerrado instituciones enteras en todos los ámbitos, sobre todo, culturales y de ayuda social.
La idea de esto es “ahorrar” gastos al gobierno, como lo han hecho ver voceros del gobierno y el mismo presidente.
Pero es que Trump nunca escondió sus intenciones. Nunca dijo o prometió algo distinto a lo que está haciendo. Pasó los últimos 4 años haciendo campaña. Es por eso que hoy, sabiendo cual es la directiva dada por el presidente a su gobierno, nadie debería estar sorprendido.
Pero en el caso de los latinos, hoy criminalizados por su ascendencia, es curioso ver cuantos latinos “justifican” las acciones que se toman contra las comunidades de las que llos mismos forman parte. Ni hablar de los latinos FUERA de EEUU que no solo apoyan las acciones del gobierno de Trump incluso con más fanatismo que los mismos trumpistas segregacionistas más recalcitrantes.
No deja de ser lamentable que muchos latinoamericanos hoy parezcan avergonzarse de su gentilicio y pretendan de una manera u otra ser reconocidos como parte de otra cosa. No puedo más que pensar en ellos como en un grupo de ignorantes de la historia latina, que se remonta a más de 5 mil años, y no solo a los últimos 500 años de la "conquista". Si supieran de donde vienen, estarían orgullosos. Pero es esa actitud y esa ignorancia justamente la que mantiene a nuestros países en el tercer mundo. No hay nada más deprimente en el mundo que el sentimiento de inferioridad de los ignorantes. Fue esa ignorancia la que mantuvo siglos de esclavitud, cuando un “amo” controlaba con un solo látigo a MILES de esclavos incapaces de sublevarse. Ignorantes de su propia fuerza.
Religión y política son temas difíciles de abordar porque tocan temas de opinión y creencias. El pensamiento de manada prela sobre el razonamiento individual. Nos unimos a una suerte de “pensamiento colectivo” en el que todos asumimos que la idea propuesta y aceptada por los demás es la correcta, y si queremos “pertenecer” a ese colectivo, debemos pensar igual que ellos. Aceptamos cada propuesta, cada tesis, sin cuestionarla en lo más mínimo. Es así como perdemos la capacidad individual de pensar y analizar. Son vestigios de un pasado primitivo que aún hoy persisten en algunos más que en otros. Esa es la base de la política y la religión. Un “líder” nos dice que es lo bueno, lo malo y quien es el enemigo. La manada apoya a este líder. Esto no es nada nuevo. Lo que si llama definitivamente la atención es ver a miembros ajenos de un grupo pretendiendo formar parte de ese colectivo, incluso cuando eso va en detrimento de sus propios derechos, sus virtudes, su valor y sus muy bien ganados reconocimientos.
Excelente toda su explicación, si me quedaba alguna duda al respecto ya está aclarada, gracias
ResponderEliminara