No hay que ser un genial estudioso de Ciencias Políticas
para comprender y predecir, al mejor estilo de Adriana Azzi, lo que sucederá en
los próximos meses con el gobierno de Venezuela. Condenar a Leopoldo López a 14 años de cárcel en medio de la crisis que vive el país es una provocación a la oposición. Pero ¿por qué?.
Voy a ser muy puntual hoy. ¿Qué pasa en Venezuela? Es la
pregunta del millón de lochas. La respuesta es bastante sencilla en realidad.
Como casi todo en la vida, es uno el que le pone complicaciones a lo OBVIO.
En solo 3 meses desde hoy, habrá elecciones en Venezuela
para elegir a los diputados de la Asamblea Nacional. ¿Y qué pasa pues? Preguntarán
muchos. Pues pasa que cualquier decisión importante en materia de presupuesto,
viajes del presidente, normativas constitucionales, aprobación de créditos a
regiones e incluso el presupuesto de la nación, debe ser discutido y aprobado
por la Asamblea Nacional. Acto seguido el presidente puede “ejecutar”.
Para comprender un poco lo delicado de la situación, hay que
caminar un poco atrás, al año 1999, en el que el difunto Hugo Chávez tomó el
poder y su primera acción fue llamar a Constituyente, es decir, a una consulta
para REFORMULAR la constitución venezolana, garante de toda nuestra legislación,
y en la que ahora se disolvía el Congreso de la república para sólo dejar la
Asamblea Nacional. Si. Antes había 2 poderes que autorizaban al presidente a
hacer las cosas: Asamblea y Congreso. Este sistema bicameral es el utilizado
por los países del primer mundo para justamente evitar que el poder se corrompa
y se centre en una sola mano. Entonces que pasó? Chávez disolvió el congreso porque
era una suerte de tranca en la bota que quería ejercer el poder al estilo de un
monarca. A partir de ahí, cualquier decisión sólo la toma el presidente y la
Asamblea Nacional, que hasta hoy es controlada por el mismo. 100% del poder en una
sola mano bajo una ilusión de legalidad constitucional.
Exactamente lo mismo quiere hacer Nicolás, con la
diferencia, que ahora la “mayoría” oficialista que antes ganaba elecciones (supuestamente!) no
la tendrá, es decir que ya no podrá decir a dedo a quien se le regala petróleo,
o viajar cada vez que le dé la gana, o decidir quién o cual estará en el CNE, o
en el TSJ, usar la chequera PDVSA como si fuera la suya, etc… en pocas
palabras, si pierde la Asamblea Nacional, tendrá que pedirle permiso y
autorización a los diputados de oposición para poder gobernar, si es que podemos decir que lo ha
hecho alguna vez.
Esto pone al gobierno en una encrucijada muy delicada. Sólo
existen pocas opciones, y las han agotado. La primera opción, era tratar de
ganar puntos en la deteriorada imagen de un gobierno que genera escasez
general, que favorece la creciente criminalidad, la hiperinflación, etc. por medio
de eso que han llamado “around the flag”, que es una estrategia política que
asegura que “ante una amenaza nacional, todos los compatriotas asumen la
defensa como objetivo común y esto suma fuerzas positivas al gobierno”. Ya lo
han tratado de hacer. ¿Cuándo?, si hacen memoria recordarán seguramente un lema
popular de hace apenas unos meses: “OBAMA,
DEROGA EL DECRETO YA”.
Ese triste (por no decir menos) intento de buscar un enemigo
a quien culpar por la ineptitud de un gobierno incapaz, sembrando la idea de
una eventual invasión, una guerra contra el más grande imperio del mundo, y
aquellas cadenas para mostrar unos “teatros de operaciones” del obeso ejército
venezolano preparándose para la guerra fueron la cereza de la torta que terminó
en NADA, pues nadie creyó aquellas descabelladas teorías. Se recolectaron unas
firmas que nadie sabe de donde salieron y tras hacernos pasar vergüenza como
país en la Cumbre de la Américas en
Panamá, en la cual Obama dejó claro que
EEUU no iba a derogar nada (y así sigue el decreto vigentísimo) y que no había
invasión ni planes de guerra contra un país que no tiene ni papel de baño,
hasta ahí llegó el “around the flag” de Maduro contra Obama. Nos costó MILLONES
DE DÓLARES en publicidad aquella mamarrachada de “Obama Deroga El Decreto Ya” y
ya nadie habla de eso.
Pero no sólo ahí se intentó fallidamente buscar “the flag”.
Se intentó luego con Guyana y el “Esequibo”. Si. Se trató. Reclamando la
propiedad sobre un territorio que hace más de 130 años no está en nuestro mapa.
Allá no hablan nuestro idioma, no usan nuestra moneda, no tienen nuestra cédula
ni hemos ido ninguno a pasar una vacación allá. La cosa fue tan balurda, que
solo semanas después se dejó de hablar del tema… ya nadie se acuerda de eso (de
nuevo). Pero ahora el Maduro se empeñó en unir a los venezolanos en una guerra
contra “otro enemigo”. Esto tampoco dio
frutos, así que había que buscar un nuevo enemigo y si se pudiese culpar de
todo pues mejor, y quien mejor que Colombia?. Allí está. Ahora el enemigo es
Colombia y los culpables de todas las desgracias de Venezuela son 1.000
Colombianos deportados y unos miles más que se han ido de manera voluntaria.
Según el gobierno, 40% de la producción nacional se la llevaban esos “bachaqueros
colombianos”. No voy a decir nada. Si usted es inteligente, eche números y
sabrá si eso es verdad.
Pero aplicar brutalidad internacional de nada sirve si no se
entiende el “fin que se persigue”. Pues el fin está clarísimo! SUSPENDER LAS
ELECCIONES bajo la excusa de guerra o invasión. Para hacer que eso suceda, la
manera es así, haciendo las cosas a lo salvaje, a lo brutal, para que Colombia
reaccione de manera similar y tener la excusa. Pero la cosa no ha funcionado. Sucede que no
todos los presidentes son pichones de Pran.
Ahora, con el tiempo corriendo ante lo que será una victoria
para la oposición en la AN en diciembre, el gobierno debe idear un nuevo plan. “The
Flag” ya no funciona debido a la actitud de Colombia, que recibe a sus
compatriotas de brazos abiertos para consolarlos por el desagravio salvaje de
un gobierno acusado de narco y además despiadado. Hoy, la prensa del mundo ve a
Santos cómo el que recibe a sus compatriotas golpeados, mientras Maduro es el
que los deporta a pie y salvajemente demuele sus casas después de marcarlas con
letras rojas al mejor estilo Nazi. Tiro por la culata. #Ups!
Hay ahora que buscar un nuevo plan e implementarlo rápido.
Quedan 2 opciones: 1- buscarle pleito a Brasil, cosa que no sucederá
seguramente por los intereses económicos con el vecino carioca, Odebrech, y más
(para los entendidos no hay que aclarar mucho), ó 2- encender el pleito INTERNO
en Venezuela. Por qué? Porque si en nuestra tierra la gente sale a protestar, a
reclamar, le damos la excusa perfecta al gobierno para apresar a los dirigentes
o candidatos de oposición, declararlos conspiradores, decir que hay una amenaza
a la paz de la nación (o cualquier vaina de esas tan típicas de ellos) y decretar
ESTADO DE EXCEPCIÓN nacional (por lo cual han utilizado a Táchira como ensayo,
y eventualmente Zulia, ambos estados que seguramente desfavorecen al
oficialismo), y suspender las elecciones que saben que perderán.
Ante este escenario, no hay otra opción que buscar una
manera de evitar que esa asamblea nacional opositora NUNCA llegue a existir.
Para eso, hay que evitar la elección. Para eso, sólo se puede hacer algo al
estilo del difunto. Inventar una amenaza nacional conspirativa contra el alto
gobierno, apresar a los opositores prominentes y llamar a una nueva CONSTITUYENTE,
en la cual la figura de Asamblea Nacional desaparezca y sea cambiada por algún
otro ente que no es más que el mismo perro pero ahora con peluca a fin de
mantener la monarquía. Ahí nace la “ASAMBLEA POPULAR SOCIALISTA” o algo por el
estilo, que será la nueva Asamblea Nacional, por supuesto manejada siempre por
la misma cúpula de poder. La excusa perfecta está ya dada y se ha lanzado el anzuelo provocador a ver si la oposición muerde: 14 años de cárcel a Leopoldo López. Provocación. Sabiamente y de inmediato, López ha lanzado un mensaje: CALMA.
¿Qué podemos entonces esperar?. 1: más escasez, más violencia, más inflación.
Por qué? Porque al gobierno le convienen que el pueblo se alce y le dé la excusa
para ejecutar el plan 2- en los próximos días, el gobierno apretará más sus
anillos de seguridad y espionaje, por lo que apresarán a muchos y acusarán a
otros de conspiraciones (si, muchas más y quizá más descabelladas) 3-
Seguramente aparecerán denuncias de planes de magnicidio, y quizá hasta
martiricen a alguien para alzar la bandera de la defensa propia entre sus
filas, como hicieron con Serra. 4- Represión, muchísima. 5- muchos viajes al
exterior para dar ruedas de prensa y declaraciones aludiendo planes de guerra
interna de la cual hay que defenderse etc. y tratar de dar una imagen
internacional de ovejita regañada, tal y como hicieron el año pasado con las
guarimbas. SEGURAMENTE NEW YORK TIMES SE LLENARÁ DE DINERO CON LAS PUBLICACIONES Y PROPAGANDAS QUE EL GOBIERNO "ANTI IMPERIALISTA" GASTARÁ PARA PUBLICAR EN SUS PÁGINAS!
Y finalmente la pregunta más repetida: ¿Cuándo saldrá este
gobierno?, lamentablemente la respuesta no es alentadora. Si efectivamente
tenemos que salir a votar masivamente y ganar las elecciones en diciembre (si
es que llegamos a ellas), el gobierno hará de todo para no perder el poder
amparado en una manipulada legalidad constitucional como la han hecho hasta
ahora… pero un paso a la vez: en diciembre, A VOTAR. De ahí en adelante, ya
veremos. EL QUE SE CANSA PIERDE!
